422 - Papeles y cenizas - Percepciones & conjeturas - Guillermo Asi Méndez

¿Qué tienen en común Vaz Ferreira, Ortega y Gasset, José Ingenieros y Karl Popper?
Tuve la feliz oportunidad de asistir a una conferencia que brindo el Dr. Ope Pasquet, sobre el Dr. Carlos Vaz Ferreira, motivada por cumplirse el pasado enero 50 años de su fallecimiento.
Como no podía ser de otra manera, aprendí cantidad de nuevas cosas sobre tan importante intelectual, para mí el más importante que tuvo Uruguay, no me referiré a lo expresado por Ope, pues con mi torpeza, devaluaría los valiosos conceptos por él vertidos en su disertación.
Se ve que mi mente estuvo procesando y trabajando toda la noche, pues hoy me levante con una idea/teoría/conjetura que deseo compartir.
Lo primero que encuentro, a través de mis lecturas de los pensadores arriba citados, es un común denominador, una idea fuerza o tal vez un mensaje que llega con claridad a mi conciencia, que construyo de la siguiente manera “la tendencia natural del ser humano es hacia la imbecilidad, solamente aquellos pocos que están conscientes de esta posibilidad y por ello advertidos y en guardia, logran algunas pocas veces no ser imbeciles, cosa a la que yo no escapo”
El hombre masa de Ortega, el hombre mediocre de Ingenieros, el intelectual rutinario de Vaz Ferreira y los intelectuales hegelianos de Popper, están tan bien caracterizados por estos pensadores y son tan parecidos en su manera de enfrentarse a las cosas de la vida, que se transforman en un ejemplo de lo que debemos evitar, la pomposidad al hablar, el pensamiento único o dogmático, la creencia en el determinismo histórico, el pensamiento negativo – tan característico en Uruguay de la generación del 45 y que lamentablemente llegó a nuestros días – toda esta exposición de defectos en la construcción del pensamiento, es expuesta y criticada en la obra de estos autores, los cuales deberían ser incorporados a la curricula en la enseñanza, y esto me lleva de la mano a mi otra conjetura.
Es un hecho que la obra de Vaz Ferreira, esta agotada hace mas de 30 años, con la excepción de las ediciones homenaje del Parlamento Uruguayo, pero estas no circulan en el ámbito comercial, también es un hecho la escasez de los libros de los otros autores mencionados, no es común encontrarlos en todas las librerías, seguramente su demanda también es escasa. Pero lo mas preocupante es la poca atención que se les brinda en los medios académicos de Uruguay, creo que la totalidad de las personas menores de 50 años no tuvieron que estudiar a estos autores, ni que hablar de nuestro Vaz Ferreira, persona a la que, en la única oportunidad que Albert Einstein visito Uruguay, insistió en conocer personalmente, puesto que tenia conocimiento de su obra, la cual valoraba.
Yo soy de los que no creen en las casualidades, mas bien encuentro que las causalidades están detrás de todos los hechos, lo que sucede que no acostumbramos a buscarlas, por eso de la tendencia imbecil, bien mi conjetura es que en Uruguay existió un censura discreta, gramisciana, hacia estos pensadores fundamentalmente contra Vaz Ferreira, aquí deseo contarles lo que me ilustró Ope en su charla, él destaco que los nombramientos a Vaz Ferreira en sus cargos de: Catedrático y Rector de la Facultad de Humanidades, fueron hechos por el poder ejecutivo, la primera vez en el Gobierno de Batlle y Ordóñez y la segunda en la dictadura de Gabriel Terra, contando con la particularidad de que Vaz Ferreira además de ser afiliado al partido Socialista de Frugoni, había escrito en prensa sus opiniones contrarias al “colegiado” y a la dictadura de Terra ¿bastante distinto al Uruguay de los últimos tiempos?
Es necesario hacer conciente que como consecuencia de la Ley Orgánica, El Estado cedió su poder a la Universidad, creando una autarquía con objetivos distintos a los del Estado.
A nivel de primaria y secundaria también se produjo un fenómeno parecido, que condujo al Uruguay de hoy, donde triunfó la mediocracia desplazando a la meritocracia.
La pregunta que me hago y les hago es: ¿contamos en el Uruguay de hoy con las fuerzas, las ganas y los pensadores independientes como para recuperar los niveles de libertad de pensamiento del 900?