El senador frenteamplista Alberto Couriel entiende que “es muy difícil” que del congreso de diciembre próximo surja la candidatura presidencial de Danilo Astori y que habrá que ir a las elecciones internas dónde, sostiene, triunfará José Mujica.
Escribe Roberto Bussero
Insistió Couriel en que el Frente Amplio (FA) tiene “una tradición histórica de acuerdos políticos para una candidatura única a la Presidencia de la República, así sucedió con Seregni, Crottoggini y Tabaré, y eso hay que buscarlo para poder gobernar en unidad, como lo hace Vázquez. Y en esa búsqueda nos vamos a pasar hasta el congreso de diciembre, pero es factible que no se logre esa fórmula. Creo que, si en las internas son candidatos Mujica y Astori, ganará el ‘Pepe’, que es quien se acerca más a la gente, tiene un enorme carisma – en la interna tiene 31% contra 9% de Astori - y me asegura el mantenimiento de un proyecto histórico de la izquierda por el cual llevo 50 años peleando”.
Enfatizó en que “no quiero que ese proyecto tenga fallas, sea violado; no digo que esto ocurra si el candidato y presidente fuera Astori, digo que Mujica garantiza la realización del proyecto, y es el que está primero en las encuestas”.
GOBIERNO EXITOSO
En primer lugar, “no cabe duda de que, desde el punto de vista económico, este es un gobierno exitoso. Un 7% de crecimiento anual promedio en tres años era algo que nadie esperaba en un país acostumbrado a no crecer más de 2% anual en los últimos 50 años. En esta mejora influyen de los precios internacionales de los productos de exportación – carne, soja, trigo, arroz -, pero también hay elementos de la política económica que ayudan, como, por ejemplo, el crecimiento permite más ingresos fiscales, y estos, por debajo del producto pero en buena medida, se dedicaron a atender el Plan de Emergencia, el Plan de Equidad, educación, salud”.
FACTORES EN JUEGO
¿Qué consecuencia tiene ese posicionamiento?
Esto ayuda a la demanda interna, y el crecimiento empuja a la mejora del salario real, sobre la base de negociaciones colectivas, consejos de salarios, más equidad en las relaciones capital – trabajo. En esa dirección, el crecimiento permitió una baja considerable del desempleo abierto, del 13% en el 2004 a menos del 8% en este momento.
En resumen: este gobierno es muy exitoso con un crecimiento que deriva de la mejora de las exportaciones, estimuladas por la suba de los precios internacionales, y del aumento de la demanda interna, donde juegan el incremento del salario real, la mejora del empleo y el aumento del gasto público.
Algunos vuelven a esgrimir el fantasma inflacionario.
Ese es otro elemento que aparece, y propiciando cierta inquietud, más bien generada por los medios de comunicación y la oposición. Ya se había dicho en la campaña electoral que no se debía votar al FA porque la izquierda genera caos financiero, especulación, fuga de capitales, grandes devaluaciones. Y nada de eso pasó, pero algo hay que encontrarle a este gobierno exitoso. Sí hay inflación, pero 7% anual no es para asustarse, no afecta para nada los niveles de inversión, crecimiento y empleo.
Además, lo que influye en esos índices son factores internacionales, como los precios de los combustibles y de los alimentos.
Pero, si bien no somos productores de petróleo, si lo somos de commodities agropecuarios en un momento en que mundo requiere alimentos.
Y en eso nos estamos afirmando, esa es la suerte de Uruguay. Estamos perdiendo en los términos de intercambio, pero no es el intercambio histórico donde los precios de las manufacturas subían y los de los primarios bajaban. Acá todos los primarios aumentan, pero ocurre que el petróleo crece más que los commodities agrícolas. Por eso perdemos, aunque de todas maneras ganamos porque hay precios muy altos de productos de exportación, y eso facilita crecer.
Por otro lado, esa situación genera aumento de precios internos, y esto sólo se soluciona con elementos fiscales y ciertas regulaciones estatales. Así se hace que las tarifas de los servicios públicos aumenten menos de lo que sería necesario, se rebajan impuestos – como el IVA a determinados rubros cárnicos -, se subsidian boletos del transporte.
NO COMPARTO MEDIDAS DEL BCU
Pero usted también ha puesto énfasis en algunos puntos con cierto desacuerdo, como ser la fijación del tipo de cambio, las condiciones de la competitividad y la operativa de la autoridad monetaria. ¿Eso lo aparta de la conducción económica?
No comparto las medidas del Banco Central. Si está claro que la inflación viene por el aumento de combustibles y alimentos, no es por factores monetarios. Sin embargo, se siente la necesidad de contraer los medios de pago. Primero lo hicieron con los agregados monetarios, luego aumentaron la tasa de interés, ahora aumentaron los encajes, todo lleva a una rebaja del tipo de cambio, de 28, 70 en el 2004 a 19,60 hoy – una muy alta inflación en dólares: 68%.
Por supuesto, esa inflación está neutralizada porque el euro y el real están muy apreciados, y los exportadores tradicionales no se quejan porque tienen precios internacionales muy altos.
Pero queda afectada la competitividad de ciertos rubros.
Si, algunos industriales, de la lana – que se exporta con menos valor agregado -, textiles, vestimenta, calzado; y todavía no llegó el momento en que, de pronto, la producción interna quede afectada al no poder competir con productos importados baratos, dada la baja del tipo de cambio.
¿Estamos “tironeados” entre Argentina y Brasil?
No, a Brasil le vendemos muy bien porque presenta una apreciación insólita del real. Lula subió con un tipo de cambio a 3,80 y ahora está 1,60. Estas cosas se pagan, recuerde nuestra tablita de 1982, la devaluación del 2002. Yo estoy preocupado, Uruguay le vende bien a Brasil y a Europa, con Argentina tenemos más dificultades, pero también está bajando el tipo de cambio real, pues el nominal se mantiene entre 3 y 3,15, pero tienen inflación interna y algunos sectores comienzan a quejarse de ese rango tan bajo.
¿Allí salta su diferencia con la línea económica?
Más bien tengo una diferencia con la política cambiaria, mantengo mis convicciones, el pragmatismo que usé durante toda la década del 90.
NO ESPERAR AL MERCADO
¿Esperar el desborde, que resuelva el mercado, o actuar desde el Estado?
A esta altura de mi vida ya no sólo tengo la convicción sino también la experiencia de que el mercado no resuelve los problemas centrales, y, si lo dejamos jugar solo, van a existir problemas de pobreza, indigencia, desempleo, en la salud y la educación. La intervención del Estado es indispensable, incluso aún estamos carentes de políticas sectoriales activas, selectivas, que serían muy importantes para mejorar los niveles de productividad y producción. Uruguay debe insertarse en el mundo con valor agregado, empleo y poderío tecnológico, no podemos seguir vendiendo recursos naturales sin industrializar. Eso es lo que vamos a seguir haciendo durante muchos años todavía, pero si se mira el mundo se ve que la inversión tecnológica en el agro en Nueva Zelandia, en Australia, aparecen exportaciones de alta y mediana tecnología. En Irlanda, Corea del Sur, Finlandia son también ejemplos a aprovechar para llevar adelante procesos de esa naturaleza en Uruguay. Eso implica, significa y necesita de la intervención estatal.
¿Qué pasa con la ley de educación, que se podía esperar estuviera pronta al asumir el FA, pero se complica, y es necesaria en esos procesos de crecimiento?
Es tan importante como difícil, sabemos que existe un proyecto, que la ministra del ramo lo tomó con entusiasmo, que los gremios a veces son duros. Creo que más que saber quién dirige la enseñanza importan los contenidos educativos. Y tenemos en el Plan Ceibal un avance revolucionario. Seguramente habrá más.
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EEUU se desinteresó de América Latina
Desde el 11-S 2001 la preocupación de EEUU es el terrorismo y, a pesar de que en América Latina éste prácticamente no existe – salvo circunstancias muy especiales de Colombia, y en un marco estructural -, nos miran desde ese ángulo. Les preocupa el narcotráfico, la migración – sobre todo desde México y Centroamérica -. Y en función de esa mirada, EEUU se desinteresó de América Latina; intentó el ALCA, pero en diciembre 2005, en Mar del Plata, los países del Mercosur y Venezuela le dijeron que querían negociar pero con el tema de los subsidios agrícolas arriba de la mesa. eEUU respondió que no, que ese tema era para la OMC.
Sin embargo, cambió su estrategia a buscar obtener tratados de comercio bilaterales, y empezaron con los países centroamericanos, Perú, Chile, Méjico.
El gobierno del FA se enfrentó al TLC propuesto, semejante al de Perú, señalando que se trataba de una imposición y no de una negociación; saldó bien la situación y se salió hacia un TIFA, que es el comienzo de una negociación, que nos puede ayudar a colocar cítricos, carne ovina y otros rubros en el mercado más apetecible del mundo. Todos quieren venderle a EEUU, yo también, pero no podíamos firmar un TLC como el que estaban armando, que afectaba normas de competencia, compras gubernamentales, servicios, propiedad intelectual.
Tiempo al tiempo, no hay urgencias, pero sí existe un mundo desarrollado que sigue subsidiándose y protegiéndose. Esos son los temas que no se tocan en la OMC: subsidios a las exportaciones, ayudas internas a la producción agrícola, rubros sensibles, cuotas, picos arancelarios, progresividad arancelaria, normas ambientales y laborales.
América Latina tiene que entender que quien está cerrando el comercio internacional, que quien está negando la libertad de comercio es el mundo desarrollado. Y no alcanza con que se unan sólo nuestros países - la región es el 5 o 6% del mundo en materia comercial -, por eso Brasil intentó juntarse con India, Sudáfrica, China, y debemos seguir buscando alianzas, en forma pragmática y hasta encontrar una salida que nos permita aumentar el poder de negociación.
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“Soy un suelto”
Hoy soy un “suelto”, un independiente, la 609 me invitó a participar en su lista sin ningún tipo de acuerdo político o financiero, y estoy trabajando en ese Espacio, lo que me facilita mi pronunciamiento personal por Mujica
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Los semáforos de Ehrlich
La gestión del intendente (Ricardo) Ehrlich no es fácil. Hace minutos, viniendo por 18, me llamó la atención que todos los semáforos estaban coordinados. Por algo me llamó la atención. Ehrlich es una persona de gran valor, pero tiene enfrente un gremio que, lamentablemente, mira hacia dentro, no al resto del país, y no le hace sencillas las cosas. De todas maneras, siempre hay obras y no es casualidad que el FA gane en la capital cada vez con mayor holgura. Espero que se repita.
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Gana el FA sin ballotage
Con una gestión económica tan exitosa, es muy difícil que el FA no vuelva a ganar la elección nacional, es muy difícil mantener la popularidad que presenta Tabaré luego de tres años de gobierno, 56%, y, además, tener un líder como Mujica con 55%. No creo que esa elección se pueda perder ni que haya ballotage, para lo que ayuda que el Partido Colorado esté muy bajo, por debajo del 10%.
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