141/ Carta - Sopa wu wei - Por Roberto Bussero

Respondiendo a Yoatí (129), con copia a...
Sobre mis hijos, tu vida, los vericuetos del existir, terrible belleza.
Hace unos días vino a vistarnos el cura Diego Pérez. Para vós eso no es novedad, sabés que viene seguido a oficiar como nuestro mentor asesor, y nos hace mucho bien. Y a él también, lo confiesa y proclama entre sus largas citas, que no sólo refieren a textos sagrados.
La conversación - confesión fluyó hacia nuestros hijos, abandonos, lejanías. Ya hace tiempo que conoce el tema.
En otras oportunidades, enterado de algunas actitudes, que incluso lo llevaron a ofrecerse como mediador (¿"facilitador"?), había propuesto dejar todo en manos de Dios, que es mucho más que supuestamente dejarlo al azar o al destino.
Ahora, Diego trajo a colación a Jung y casi recitó un texto que terminaba citando la confección de una "sopa wu wey" - que, a propósito, era el modelo que estaba tomando para hacer una que iba aser plato principal de una cena comunitaria de su congregación el domingo siguiente -.
¿Cuál era ese modelo?
Muy simple. Una gran olla de agua, quizás alguna sopa sacada del freezer, algún gusto y, poco a poco, agregar espinacas, calabacines o zapallo, toomates, zanahorias, ... de todo. Dejar hacer, "hacer en el no hacer".
Una espera activa, en actitud y fe.
Un poco al modo Lennon, Let'ut be, déjalo ser, correr, crecer.
Y entender que si al dolor se lo abraza no mata, sólo hiere, pero deja abierta la espera, que es esperzanza.
Para Diego es como fue para Pablo, "lo que más...", magis, como planteó Ignacio de Loyola, muy lejos del mundano concepto de excelencia. ¿se `puede esperar sin considerar que Dios tiene el asunto en sus manos?
Diego insiste: "acá hay más vida..., no saben lo que se pierden al no estar aquí para acompañarte". Sabe de postmodernidad, niega el consumismo: "esto no es sólo teatro, de algún modo vas a terminar agradeciendo las limitaciones; en cambio, no se puede vivir como Saturno, o el sol negro, o la sombra que te busca como reflejo".
Ojalá tenga razón, ¿a vós que te parece, Yoatí?, ¿cómo andás copn tus constelaciones? Como vés, las mías desarmadas, en espera, con Duios, Diego, Jung y dos santos - además de Susi, la gata Lola y la perra Frida - como apoyos
Roberto