Retinas - ¿Qué futuro? - Por José Portillo

Qué futuro?
José Portillo
Si bien es cierto que hoy existen recursos tecnológicos para satisfacer las necesidades básicas de todos los habitantes de la Tierra, simultáneamente la brecha entre los ricos y los pobres se agranda: en el siglo XVIII esa diferencia era 3 a 1 mientras que en el siglo XXI es 80 a 1. También es cierto que esa misma tecnología es capaz de terminar con la vida en la Tierra, algo que nunca antes había sucedido.

Hace poco tiempo, Kofi Annan, el ex Secretario General de Naciones Unidas, declaraba: "la de hoy es la primera generación que cuenta con los recursos y la tecnología para hacer realidad para todos, el derecho al desarrollo y poner a la especie humana al abrigo de la necesidad". También se dice que los científicos vivos en la actualidad, superan en número a los que han existido en todo la historia de la Humanidad. Sin embargo la pobreza es una pandemia que no cesa de extenderse.
Hace pocos días el País de Madrid, recogía parte de un Informe de Naciones Unidas preparado para analizar el avance en el cumplimiento de las metas para el año 2015, en 8 objetivos. Según dice el País, "el informe muestra más sombras que luces" y las posibilidades de cumplir las metas se alejan. Si bien, quizás hay menos pobres, son cada día más pobres. Si bien, ciertos sectores de Asia han mejorado espectacularmente sus economías y el bienestar de sus ciudadanos, en el África subsahariana casi la mitad de la población vive (?) con un dólar por día.
El sistema de agencias de Naciones Unidas ha funcionado fijando metas que generalmente resultan absolutamente incumplibles, como ser "Salud para todos en el año 2000". Sin embargo no debe de dejarse de reconocer que estos slogans cumplen una función en la generación de una actitud crítica sobre los problemas en cuestión. Sólo el hecho de ocupar lugar en los medios de comunicación masivos y desbordar las publicaciones especializadas, es rescatable. Pero sin duda, las expectativas son mucho menores que lo que las palabras sugieren.

1-Educación

Si bien el asistir a la escuela es un derecho universal, se calcula que 115 millones de niños en el mundo no concurren a la escuela o desertan. Los analfabetos niños son casi la mitad en África subsahariana y un tercio en el Asia meridional. Si reunimos ambas regiones, 8 de cada 10 niños no concurre a la escuela. La falta de educación es el principal componente en el circulo que reproduce la pobreza. Incluso la educación de la madre es la variable que tiene mayor importancia en disminuir la mortalidad infantil.

2-Medio Ambiente

Si no se racionaliza el uso de los recursos naturales, se corre el riesgo, relativamente inminente, de su agotamiento (hidrocarburos, agua, ozono, madera). Los conocimientos y las declaraciones de numerosas reuniones internacionales siguen siendo totalmente insuficientes, según la ONU, para frenar el deterioro del medio ambiente, por destrucción del hábitat y la continua desaparición irreversible, de numerosas especies. En los últimos 10 años se han perdido una cantidad de bosques equivalente a toda la superficie de Venezuela. El cambio climático continúa a un ritmo preocupante. Se ha podido recuperar parcialmente la capa de Ozono, lo cual es un ejemplo de acciones concretas y de logros reales. Pero como siempre, la principal "contaminación" ambiental surge de la pobreza. Se calcula que 1.000 millones de personas viven en cantegriles o villas miserias y que 2.600 millones, carecen de saneamiento adecuado.

3-Desarrollo

Según las Naciones Unidas, 50 países del mundo se encuentran en situación especialmente grave en materia de desarrollo y hacia ellos se dirige la mayoría de la ayuda económica internacional, que en 2004 alcanzó la nada despreciable suma de 79.000 millones de dólares (5 veces el producto anual del Uruguay). Sin embargo ello representa sólo el 0.25 % del PBI de los países ricos, cuando la meta fijada es alcanzar el 0.70 % de ese PBI. Aunque es posible que la ayuda suba a 100.000 millones en 2010, nada se logrará si no se toman otras medidas económicas que favorezcan un comercio internacional justo entre ricos y pobres y se eliminen los subsidios agrarios de los ricos. Es imprescindible también la difusión tecnológica y el estímulo de Economías Intensivas en Conocimiento.

4-Pobreza y Hambre

La pobreza extrema sigue afectando a 1.000 millones de personas y 815 millones viven (y mueren) con hambre. En el caso de los niños cuando no mata, deja secuelas intelectuales y físicas de por vida. Un cuarto de los niños de los países subdesarrollados con menos de 5 años de edad, están malnutridos. 150 millones de niños tienen peso inferior al correspondiente a su edad. En el caso de África subsahariana y Asia meridional, la situación tiende a empeorar: a la pobreza y el desempleo, se unen el SIDA, el estancamiento del desarrollo agrícola, las guerras y los problemas de aculturación vinculados a las migraciones. A todo ello hay que agregar los desastres naturales, que como es bien sabido afectan casi en exclusividad a los pobres. Es bueno comparar las cifras de victimas de los terremotos producidos en Turquía y en Japón, en los últimos años.

5-Salud Materna

Según las Naciones Unidas, más de 500.000 mujeres (jóvenes y pobres) mueren en el mundo por patologías vinculadas al embarazo y al parto. 10 millones, no mueren, pero sufren severos problemas por la misma razón. Es obvio, que la ausencia materna agrava la natural fragilidad de los niños. Si en el los países ricos mueren 14 mujeres cada 100.000 nacimientos, en los países pobres asciende a 450 cada 100.000. En el África subsahariana tener un hijo es uno de los mayores riesgos: muere 1 de cada 16 mujeres. Para evitarlo alcanza con una buena educación para la planificación familiar y servicios de salud adecuados para controlar su embarazo y asistir el parto. Sin embargo más de 200 millones de mujeres en el mundo no pueden acceder a métodos anticonceptivos seguros.

6-SIDA

Ya han muerto, desde el descubrimiento de la enfermedad, 20 millones de personas en todo el mundo. Hoy en día, otros 39 millones son portadores del virus. La epidemia se extiende extremadamente rápido entre las mujeres. Ha crecido enormemente en algunos países de la ex - Unión Soviética, pero como en lo demás, África subsahariana es el record: 7 % de los adultos están infectados. A medida que se extiende la epidemia, aumentan las mujeres y niñas infectadas, que ya llegan al 50 % de los infectados y por lo tanto, también aumenta el SIDA congénito.

7-Niñez

Actualmente mueren 11 millones de niños antes de cumplir los 5 años ( 30.000 por día) de causas casi todas prevenibles. En 2 años mueren más niños por ser pobres, que los muertos por SIDA en 20 años de descubierta la enfermedad. Casi todas las enfermedades que producen la muerte tienen directa relación con el hambre y la desnutrición. Con educación de la madre, agua potable, suero de rehidratación oral, las vacunas y no más de 2 antibióticos, se evitaría más del 90 % de las muertes. Mientras en los países ricos el sarampión no existe, en los países pobres murieron 540.000 niños sólo en 2002, por esta enfermedad o sus complicaciones y 30 millones se habían enfermado. La mayoría de las enfermedades infecciosas que matan a los niños, lo hacen en aquellos malnutridos y con anemia, como consecuencia de las deficiencias alimentarias más la falta de higiene y la falta de servicios médicos adecuados (de poca complejidad).

8-Género

Las diferencias culturales y políticas, no son obstáculo para que la enorme mayoría de la humanidad acepte como una norma universal, la igualdad de género. Sin embargo en la realidad, está lejos de lograrse, incluso en el mundo occidental. Varios países han legislado para garantizar el acceso de la mujer a la vida pública y política, pero siguen siendo minoritarios. En todo el mundo la mujer tiene menos posibilidad que el hombre de ocupar un cargo rentado y mucho más si es de dirección. La ONU señala que esta disparidad es mayor cuanto mayor es el nivel de educación.
En suma, la humanidad más rica, tiene una deuda gigantesca con la humanidad más pobre: lograr transferir el mínimo de conocimientos y de riqueza para lograr lo que parece una utopía; que nadie muera de hambre. Como dijo Kant: "se habla mucho de virtud, pero hay que erradicar la injusticia para ser virtuoso".

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